La evolución es algo natural. Aunque para unos esto puede ser un proceso que toma siglos en llevarse a cabo, hay casos en donde en un abrir y cerrar de ojos han sucedido una serie de cambios que modifican por completo la forma en la que vemos o interactuamos con algo. En el caso de los videojuegos, siempre que una serie con décadas en el mercado tiene alguna novedad que mostrar, los fans esperan algo nunca antes visto, capaz de cambiar por completo cierta fórmula, y dar pie a un futuro brillante. Sin embargo, hay ocasiones en donde no vemos grandes saltos en la innovación, sino pequeños pasos que, poco a poco, van construyendo un camino firme y seguro, por el cual muchos están dispuestos a caminar, y solo modifican la dirección cuando lo ven necesario. Este es el caso de Pokémon, quien, durante sus últimas generaciones, ha hecho esto exactamente.
Después del éxito que fue la quinta generación, los fans estaban emocionados por el futuro de la serie. Sin embargo, una vez que X & Y llegaron al mercado, la constante evolución ya no fue tan marcada como antes. Pese a que la franquicia estaba experimentando con su estructura y mecánicas, la fórmula había sido la misma, y cuando fue el turno de Sword and Shield de tomar el escenario principal, los fans estaban listos para un cambio más grande. Si bien las Wild Areas, zonas en donde puedes explorar a tu libertad y ver a los pokémon caminar junto a ti, mostraban un potencial, estos títulos no lograron ofrecer lo que muchos esperaban. Afortunadamente, Pokémon Legends: Arceus tomó este concepto y lo llevó a un nuevo nivel que, si bien no estaba libre de errores, prometía un futuro sólido para la franquicia.
Es aquí en donde Pokémon Scarlet & Violet entran en escena. Como el inicio de la novena generación, los desarrolladores no solo decidieron por fin implementar un mundo abierto en forma, sino que la estructura de la serie se ha modificado para reflejar esta nueva forma de exploración, algo que por fin cumple el sueño de muchos. ¿Es Pokémon Scarlet & Violet el futuro de la serie? ¿Los cambios a la fórmula son positivos? Descubre las respuestas a estas y más interrogantes en nuestra Atomix Review.
Mi tesoro
En primera instancia, Pokémon Scarlet & Violet siguen ofreciendo la misma experiencia a la que ya estamos acostumbrados. Es decir, la aventura una vez más nos pone en los pies de un joven que decide embarcarse en una viaje a lo largo de la región en turno, siendo en este caso Paldea, la cual está inspirada en la cultura de España. Una vez más tenemos que convertirnos en el Campeón, vencer a un equipo de villanos, y descubrir los secretos que se ocultan en cada esquina. Lo interesante, es que no hay un orden determinado para cada una de estas tareas, y eres completamente libre de llevar a cabo algún objetivo, o simplemente ignorarlo.
En esta ocasión tomamos el papel de un personaje completamente nuevo a la región de Paldea, quien está inscrito en la escuela de la región, Academia Naranja para Scarlet y Academia Uva para Violet. En el camino al primer día de clases nos topamos con el pokémon de la caja, Koraidon o Miraidon, quien ha sufrido de un accidente, ocasionando que sus poderes desaparezcan por completo. En lugar de dejar a la criatura en paz, nuestro protagonista decide convertirse en su amigo. Una vez ya en el colegio, el director nos introduce a la Búsqueda del Tesoro, el gran evento anual en donde todos los alumnos pueden recorrer el mundo con el objetivo de encontrar su tesoro. En nuestro caso, esto se reduce a tres aventuras principales.
Durante las primeras horas de la aventura, múltiples personajes son introducidos, cada uno con una tarea específica para nosotros. Nemona, nuestra rival, nos presenta Victory Road, un camino muy familiar. Aquí, nuestro objetivo es completar cada uno de los ocho gimnasios para tomar un examen especial, y competir para obtener el rango de Campeón. Por otro lado, Arven es un joven obsesionado con los pícnics, quien nos pide ayuda para encontrar y derrotar a cinco Titanes diferentes, pokémon que han crecido en tamaño y poder a lo largo de Paldea, dando pie a Path of Legends. Por último, pero no menos importante, alguien conocido como Cassiopeia nos recluta para ponerle un fin a Team Star y a todos sus líderes, comenzado así Starfall Street.
Cada una de estas aventuras se puede llevar a cabo de la forma en que lo desees. No hay un orden determinado que tienes que seguir, y nada te detiene de simplemente completar Victory Road, y ni siquiera tocar el resto. Esta es tu búsqueda del tesoro. Sin embargo, cada una de estas historias nos ofrece una perspectiva muy interesante del mundo de Pokémon y las distintas relaciones que hay entre todos los habitantes de Paldea.
Victory Road, pese a ser el camino más sencillo de todos, ofrece las batallas más emocionantes de todo el juego. Por su parte, Nemona logra por fin cumplir algo que Pokémon ha intentado desde la tercera generación, y no han logrado efectivamente, y se trata de crear un rival que al mismo tiempo es nuestro amigo. Personajes como Gary, o Blue, y Silver funcionan como competidores naturales debido a su actitud agresiva. Sin embargo, esto es algo que no se puede replicar fácilmente cuando tenemos a alguien que en múltiples ocasiones se siente inferior a nosotros. Esto no sucede en Scarlet & Violet, ya que nuestra compañera de clase cuenta con una actitud energética, similar a la persona popular de la escuela, quien no desea que tú seas mejor que ella o él, sino que quiere que ambos crezcan por medio de la competencia.
Respecto, Path of Legends, aunque comienza de una forma muy sencilla, eventualmente evoluciona en una tierna aventura en donde podemos ver la mejor representación de un entrenador haciendo todo lo posible por su pokémon. Es un viaje algo corto, pero cada uno de los enfrentamientos valen la pena, no solo por los beneficios que se obtienen, sino por ver cómo es que esta historia se va desarrollando a lo largo de todo el juego. Por último, Starfall Street puede verse como una misión que no se aleja de los conceptos básicos de los equipos enemigos que hemos visto desde Alola, pero, al igual que Path of Legends, cuenta con un mensaje emotivo que no solo habla sobre la amistad entre aquellos que han sido rechazados, sino que también toca el tema del bullying, aunque de una forma sumamente superficial.
Claro, el juego tiene mucho más que ofrecer una vez que terminas estas tres aventuras, y Paldea es una extensa región que esconde múltiples secretos. Pese a que la historia se puede llegar a sentir como lo mismo, pero estructurada de una forma diferente, el juego hace un fantástico trabajo al representar su mundo. Cada uno de los líderes de gimnasio tiene una profesión adicional, como Iona, quien es una streamer. La escuela no solo es una excusa para darle pie al viaje, sino que es eso, una academia, en donde puedes tomar clases, interactuar con otros estudiantes, y hasta presentar exámenes sobre diferentes temas relacionados con Pokémon. La comida es una parte fundamental de cada pueblo, y siempre es interesante ver qué tipo de guisados están disponibles.
Claro, Scarlet & Violet no están libres de problemas. Debido a que puedes avanzar cada historia a tu propio ritmo, el tipo de tareas que tienes que cumplir previo a los respectivos clímax de cada camino, son casi las mismas. Si bien hay un poco de variedad entre ellas, se nos presenta una fórmula que puede llegar a cansar al jugar durante las poco más de 20 horas que uno se tarda en completar cada uno de los objetivos presentes. De igual forma, una vez que termines una de estas aventuras, no existe el sentimiento de satisfacción que uno podría esperar, y esto es algo que solo se logra alcanzar una vez que terminas todos y cada uno de las misiones correspondientes de las tres campañas, eliminando así parte del encanto que nos presenta el juego al darnos la oportunidad de hacer lo que uno desee.
Pese a sus ocasionales tropiezos, Pokémon Scarlet & Violet ofrece una aventura llena de la calidad que uno puede esperar de este tipo de juegos. Pese a que las tres tareas principales son objetivos que en cualquier otra generación hubieran formado parte de una sola historia, la libertad que nos ofrece esta generación al momento de llevar a cabo cada una de las misiones se siente como aire fresco para la serie, aunque no está libre de problemas estructurales y momentos monótonos. Sin embargo, el carisma es algo que desborda en esta entrega, y las relaciones que el jugador crea con Nemona, Arven, y todos los profesores de la Academia es algo que está bien manejado, y son el corazón de esta búsqueda del tesoro.
Un paso adelante, dos atrás
A Pokémon se le pueden criticar muchos de sus apartados, pero su estética y el diseño de las criaturas son características que usualmente son alabadas por todos los fans. En esta ocasión somos transportados a la región de Paldea, un extenso continente que, no solo nos ofrece las ya características zonas a las que estamos acostumbrados, como desiertos, montañas llenas de nieve, y playas, sino que cada locación cuenta con un toque inspirado en España que le otorga una clara identidad a esta generación, logrando así una distinción visual marcada con Galar o Alola, por ejemplo.
Si bien cada pueblo cuenta con al menos una estructura que las hace resaltar, como un mercado en donde puedes participar en varias subastas, o un molino gigante, la joya de la corona se la lleva Mesagoza, la capital de Paldea. Esa ciudad es extensa, con múltiples comercios, restaurantes y un par de atracciones. Sin embargo, el edificio que más llama la atención es la Academia de tu respectiva versión. La escuela es enorme, y por fuera claramente cuenta con una inspiración en la arquitectura Art Nouveau, similar a la iglesia de La Sagrada Familia en Barcelona.
Al igual que con los personajes, los desarrolladores saben que el carisma es parte importante de este mundo, y han hecho todo lo posible por crear locaciones que sean memorables, y reconocibles de forma inmediata. Si bien este objetivo no se logra con todos los pueblos que puedes visitar, hay un par que estoy seguro, no podrás olvidar. Esto también se puede ver reflejado en nuestro protagonista. En esta ocasión, las herramientas de personalización se han expandido, y desde el primer momento puedes crear a un personaje con más detalles faciales en comparación con lo visto en Sword and Shield. Sin embargo, la selección de ropa que hay en el juego es muy limitada y, considerando que somos estudiantes, solo hay cuatro opciones de vestimenta, sin la posibilidad de obtener una prenda casual de una forma sencilla.
No hay que olvidar al que probablemente es el factor más importante de cada nueva generación: los pokémon. Aunque no puedo hablar a detalle sobre todas las sorpresas que Paldea esconde en cada esquina, el juego hace un fantástico trabajo con el sentimiento de asombro que se crea cada vez que descubres una criatura que no conoces caminar a lo largo de la región. De la selección que puedo mencionar, Cyclizar es de mis favoritos, y uno que formó parte de mi equipo final. Este dragón cuenta con dos llantas, creando una fusión entre algo orgánico, y un medio de transporte para todos los habitantes de este mundo. Por su parte, Armarouge y Ceruledge, sobresalen al tomar una forma humanoide, con una armadura, la cual deja que el fuego que emiten sus cuerpos logre salir creando hombreras y espadas, respectivamente. Sin embargo, es Iron Treads el que llama más la atención. A primera instancia, luce como una variación de Donphan, pero su estética cibernética es algo que deja en claro que hay mucho de lo que uno puede notar fácilmente, creando así un contraste muy notorio con el resto de los monstruos de bolsillo que aquí nos encontramos.
Claro, esta es solo una pequeña selección, y mis diseños favoritos son spoilers. Solo les puedo comentar que, si no fueron expuestos a las filtraciones, el viaje a lo largo de Paldea estará repleto de sorpresas. Desde nuevas criaturas, pasando por variaciones regionales, hasta un par de pokémon que no podrás creer que son reales. Es un sentimiento espectacular.
Lamentablemente, no todo es tan bueno como a muchos nos gustaría. Pokémon Scarlet & Violet, al igual que Legends: Arceus, son juegos de mundo abierto, en donde claramente se puede ver que el Switch no puede con todo lo que se nos presenta. Si bien la estética de la nueva generación está por arriba de lo visto en Galar, su apartado técnico deja mucho que desear. Considerando que estamos hablando de una extensa región, en donde no existen los encuentros aleatorios, ningún combate requiere de una pantalla de carga, y solo hay un par de secciones en donde tienes que abandonar el mapa principal, todo está corriendo al mismo tiempo, por lo que constantemente somos sometidos a caídas de frame rate, pop-in de todo tipo, y a un par de glitches visuales en donde la cámara se posiciona de una forma que no debería.
Con suerte, el juego logra ofrecer 30fps por más de un minuto. Gracias a que constantemente estamos rodeados de diversos pokémon, el juego no es capaz de mantenerse lo suficientemente estable. Al final del día, este es un RPG clásico, por lo que esto no afecta al gameplay, pero si puede tener repercusiones negativas en la experiencia de más de una persona. A esto hay que sumarle el constante pop-in de criaturas, las cuales pueden sorprenderte al acercarte a ti en un instante. Por su parte, la carga de texturas es algo que siempre está presente. Debido a su naturaleza como juego de mundo abierto, eres capaz de ver el horizonte desde una montaña, pero solo podrás apreciar un montículo café o verde sin una definición clara, y no es hasta que estás a unos metros de distancia, que la locación toma forma. Junto a esto, múltiples NPC y monstruos de bolsillo se mueven a un frame rate diferente al tuyo, y esto no se arregla al acercarte a ellos, como en Monster Hunter Rise. Por último, hay momentos en donde una batalla se lleva a cabo en un desnivel, por lo que la cámara no actúa de forma adecuada, ocasionando que el suelo desaparezca a lo largo del enfrentamiento.
Afortunadamente, no hay un solo glitch que ocasione un fallo crucial en la experiencia. En el aspecto técnico, el mundo abierto no logra estar al nivel de lo visto en Breath of the Wild o Xenoblade Chronicles 3, y es algo decepcionante que, después de ver estos mismos problemas en las Wild Zones y las áreas DLC de Sword and Shield, así como en los mapas de Legends: Arceus, no solo no veamos una solución, sino que estos inconvenientes han crecido.
Pokémon Scarlet & Violet toman un paso adelante, y dos atrás. Paldea es una fantástica región que logra tomar los elementos más llamativos de España, y les da un giro, creando así una identidad con una clara diferencia en comparación con Galar o Kalos. Junto a esto, el diseño de los pokémon es espectacular, con tan solo un par de excepciones, puedo decir que el PokéDex que aquí se nos presenta es uno de los más fuertes en toda la serie. Sin embargo, el aspecto técnico hace que la experiencia no sea tan sólida como a muchos les gustaría. Los problemas de frame rate, el constante pop-in y carga de texturas hacen que el impacto que los desarrolladores esperaban tener con esta nueva mirada al mundo de Pokémon, no sea tan efectiva como seguramente esperaban.
Al ritmo del pasado y el futuro
La música es una de los pocos apartados que nunca logran decepcionar a los fans de Pokémon. No importa si cierta generación es muy fácil, si la historia en alguna entrega no cumple con las expectativas, o si las mecánicas no están refinadas, siempre podemos esperar un soundtrack que hace un fantástico trabajo y, para la sorpresa de nadie, Scarlet & Violet nos ofrecen composiciones de primer nivel que, no solo toman los mejores elementos de Sword and Shield, sino que también cuentan con una serie de ideas únicas.
Una vez más, el tema principal nos da la bienvenida a este mundo. La melodía es alegre, invitándonos a visitar Paldea y experimentar con todo lo que aquí encontramos. Cada uno de los pueblos tiene una atmósfera hogareña, en donde fácilmente puedes pasar un buen rato como turista, visitando los diferentes restaurantes y gastando todo tu dinero en las diversas tiendas disponibles. Al explorar todas las zonas somos acompañados de una serie de composiciones que incitan a la exploración, cada una cambiando en tono, y agregando o eliminando instrumentos cada vez que llegamos a un desierto, escalamos una montaña nevada, o nos adentramos a una cueva. La mayoría presentan una inspiración en el flamenco, en donde la guitarra acústica está presente de una forma u otra.
Cuando llega el momento de las batallas el ritmo aumenta considerablemente. Algunos de los elementos clásicos de la serie están presentes, pero en general se puede escuchar un estilo único. Dependiendo de si estás peleando contra una criatura salvaje o un entrenador, la intensidad será diferente. Sin embargo, son los enfrentamientos específicos para cada una de las tres aventuras los que se llevan las palmas en este apartado.
Cada uno de los líderes de gimnasio tiene una melodía que, pese a no ser tan imponente como en previas generaciones, refleja a la perfección las diferentes actitudes de estos personajes y, como cereza en el pastel, los gritos de todos los espectadores, algo que escuchamos en Galar, está de regreso durante la última fase de cada pelea, lo cual eleva sustancialmente la emoción que cualquiera puede tener en estos momentos. Por su parte, los enfrentamientos contra los Titanes cuentan con una composición mucho más fuerte, en donde el uso de instrumentos más pesados dejan en claro el tipo de bestia que tenemos frente a nosotros. Por último, el tema de Team Star hace uso de sintetizadores para enfatizar al grupo juvenil al que tenemos que oponernos.
Todas las composiciones juegan con una serie de elementos del futuro y del pasado, manejando así los temas principales que encontramos a lo largo de esta generación. En un fantástico soundtrack que, como seguramente ya muchos esperaban, no decepciona. El único detalle que puede no ser del agrado de algunos, es que Scarlet & Violet no cuentan con algún tipo de voz. Aquí se nos presentan diversas cinemáticas que se hubieran beneficiado sustancialmente de algún tipo de doblaje para dejar en claro los momentos más importantes de la narrativa, y es algo que, espero, Pokémon por fin implemente en un futuro.
Manteniendo la fórmula
En 1996, Game Freak creó una fórmula que hasta el día de hoy siguen usando. Esto no es algo malo. Los desarrolladores fueron capaces de hacer que los RPG, un género que en su momento no era tan popular, fueran aceptados por las masas, y todo gracias a un gameplay sencillo en donde los jugadores tienen la oportunidad de experimentar con todas las opciones a su disposición. 25 años más tarde, los cimientos no han cambiado. Scarlet & Violet siguen presentando un sistema de piedra, papel y tijera en donde puedes crear un equipo de seis criaturas de una lista que, literalmente, casi alcanza los mil pokémon. De esta forma, la novena generación se encarga de refinar estos conceptos, y al mismo tiempo presentar una nueva mecánica que, lamentablemente, seguramente será olvidada una vez que la siguiente entrega principal esté disponible.
Al conservar la misma fórmula, esto quiere decir que los conceptos básicos aún están presentes. Todos los pokémon tienen uno o dos tipos, cada uno proporcionando fortalezas y debilidades, y siempre es interesante ver qué tipo de combinaciones ofrecen las nuevas criaturas. Junto a esto, los monstruos de bolsillo cuentan con una habilidad que puede ir desde provocar lluvia en el campo de batalla, hasta eliminar por completo una de sus vulnerabilidades; así como una naturaleza, la cual es capaz de mejorar una de sus estadísticas, pero a costa de otra. De igual forma, nuestros compañeros pueden hacer uso de hasta cuatro movimientos que son capaces de mejorar momentáneamente su poder, reducir las capacidades de un oponente, o simplemente atacar, ya sea con golpes físicos o especiales y, dependiendo de la afinidad que alguien tenga y el rol que deseas darle, algunas opciones son más efectivas que otras. Por último, también puedes hacer uso de ítems con diferentes efectos, tanto fuera como dentro de una batalla.
En este sentido, nada ha cambiado. A gran escala, Scarlet & Violet no introducen algo que sustancialmente altere la fórmula o el sistema de combate. Esto no es necesariamente malo, ya que la última vez que vimos algo así fue en la cuarta generación. En su lugar, cada entrega principal se ha encargado de expandir el número de movimientos, habilidades, pokémon e ítems. De esta forma, en el nivel micro, estos títulos cumplen muy bien su función, ya que todo lo nuevo que Paldea tiene para nosotros llega a estar al nivel de lo visto en entregas pasadas. Es decir, las combinaciones de tipo son interesantes, y gran parte del catálogo de criaturas que vemos por primera vez fortalecen el ya extenso PokéDex. El único cambio llamativo es el hecho de que los TM regresan a ser desechables, pero ahora puedes crear estos objetos con una serie de recursos que encuentras por todos lados.
Sin embargo, sí hay algo completamente nuevo en esta entrega, y se trata de las transformaciones de teracristalización. Desde la sexta generación hemos visto cómo cada nueva entrega principal se ha encargado de introducir una mecánica única de cada región. En Kalos fueron las Mega-Evoluciones, en Alola los Z-Moves, y en Galar el uso de Dynamax y Gigantamax. De esta forma, en Paldea tenemos el fenómeno Terastal, el cual llega a ofrecer una nueva aproximación a la construcción de equipos y a los combates.
Mientras que los Z-Move y Dynamax eran opciones que solo funcionaban una vez o por tiempo limitado, la teracristalización es similar a las Mega-Evoluciones. Esta transformación no solo le da un diseño de cristal a todos los pokémon, así como una corona, sino que transforma por completo sus tipos. Esto quiere decir que un Pikachu de tipo eléctrico puede cambiar a tipo volador, y así eliminar una de sus debilidades, sorprender a su oponente, y sacarle provecho a uno de los nuevos movimientos. Sin embargo, esto también significa que se vuelve vulnerable a otras cosas. Como toda buena mecánica en la serie, su objetivo está en crear juegos mentales entre los competidores humanos, ya que nunca sabes qué pokémon cambiará en cualquier momento.
Sin embargo, al tratarse de una mecánica sumamente fácil de usar, puesto que no requieres de un ítem o un movimiento especial, la mayoría de los pokémon que puedes capturar en el juego no tienen una teracristalización que ofrezca un cambio sustancial. Esto quiere decir que tu Wooper del inicio, el cual es tipo veneno y tierra, solo podrá cambiar su tipo a veneno puro. Afortunadamente, hay diferentes formas de encontrar criaturas que cuenten con algo nuevo. Aquí se nos presentan dos opciones, la primera es buscar a lo largo de Paldea por monstruos de bolsillo que tengan un brillo especial, y capturarlas. Por otro lado, puedes participar en incursiones. Al igual que en Sword and Shield, este un modo cooperativo, en donde hasta cuatro jugadores pueden pelear contra un gigante pokémon, el cual cuentan con una teracristalización especial.
A diferencia del resto del juego, en donde participamos en combates por turnos, las incursiones se llevan a cabo sin esta restricción. Esto quiere decir que tienes un tiempo determinado para vencer a un contrincante, y cada uno de tus movimientos se ejecuta de forma casi instantánea, por lo que no tienes que esperar a que un compañero o el pokémon con el que estás peleando realice una acción. Es un cambio interesante, y estoy seguro de que en un futuro este modo de juego nos proporcionará una forma de obtener algunas criaturas especiales.
Pokémon Scarlet & Violet es una generación en donde encontramos una serie de cambios y mejoras menores que moverán a la serie hacia nuevos territorios. Sin embargo, considerando que ninguna de las mecánicas únicas de las últimas entregas se han encontrado más allá de sus respectivos juegos, la teracristalización, pese a todo su potencial al cambiar los tipos, seguramente no lo veremos en los próximos títulos. En este sentido, ¿qué aporta de verdad Scarlet & Violet? Bueno, la respuesta es su mundo abierto.
De punta a punta
Similar a Skyrim en su momento, Breath of the Wild dio pie a una forma distinta de pensar cuando hablamos de juegos de mundo abierto. El título de 2017 no solo era grande y con un sin fin de actividades por hacer, sino que logró ofrecer un sentimiento de libertad que pocos habían experimentado en su momento. Desde entonces, varias compañías han intentado dar algo similar, con Immortal Fenyx Rising siendo el caso que más se ha acercado a esta visión. De esta forma, ahora es el turno de Pokémon de ofrecernos su propia interpretación de este género.
La pregunta es: ¿Pokémon Scarlet & Violet ofrecen la libertad que los fans esperan del género hoy en día? La respuesta corta es un sí. Desde el momento que el tutorial llega a su fin, tienes la oportunidad de avanzar y hacer lo que desees. Sin embargo, la progresión no está construida para esto. Es decir, nada te detiene de emprender un viaje a la punta de la montaña que está a varias horas de distancia, pero los combates contra entrenadores y pokémon salvajes no toma en consideración esta decisión.
Esto resulta en momentos en donde puedes encontrar pokémon de nivel 50, mientras que tu equipo está conformado por criaturas de nivel 10. Junto a esto, el caso contrario también es una posibilidad. Scarlet & Violet carecen de una progresión que tome en consideración el estado en el que te encuentras, y esta es la mayor oportunidad perdida de estas entregas. Mientras que los juegos te motiva a explorar en el orden que lo desees, existen varias barreras estilo Elden Ring, por poner un ejemplo reciente, en donde se te incita a abandonar ciertas zonas hasta que tengas la fuerza necesaria para avanzar sin algún tipo de problema. Junto a esto, las habilidades de Koraidon y Miraidon solo se obtienen al llevar a cabo las misiones de Path of Legends. Esto significa que si dejas esta historia al último, no tendrás acceso a surfear y escalar montañas, algo que, si bien no es necesario para recorrer Paldea de pies a cabeza, sí hace mucho más sencillo el viaje.
Afortunadamente, el mundo abierto comete más aciertos que errores. Uno de los elementos que esta generación logra a la perfección, es el sentimiento de asombro. A diferencia de otros títulos en donde constantemente estás descubriendo lugares en el mapa, Scarlet & Violet nos sorprenden con el tipo de pokémon que caminan por esta región. Es emocionante ver algo completamente nuevo e ir corriendo para descubrir de qué se trata, y esto se mantiene hasta los últimos momentos de la aventura en Paldea. Por si fuera poco, y como siempre sucede, el post-game tiene un par de sorpresas que te harán recorrer cada rincón posible.
Es impresionante lo que Scarlet & Violet han hecho con Pokémon. Aunque a primera instancia luce como si Game Freak simplemente tomó elementos que han demostrado funcionar en otros juegos de mundo abierto, esta generación logra cumplir el sueño de muchos. Este es el salto más grande que ha hecho la serie, y si bien hay un par de tropiezos en el camino, estoy seguro que serán corregidos en futuras entregas. La exploración tiene un par de complicaciones, pero nada te impide visitar cualquier parte de Paldea cuando lo desees, y una vez que obtienes las habilidades suficientes y cuentas con un equipo de buen nivel, de verdad sientes que nada te podrá detener.
Evolución
Pokémon Scarlet & Violet son un fantástico inicio para la novena generación. Cada uno de los cambios que se han introducido en la historia y gameplay son un aire fresco para la serie y, pese a tener un par de tropiezos en el camino, espero que Game Freak tome las ideas que aquí nos presentaron para evolucionar a la franquicia aún más en un futuro. Todos los experimentos que se han llevado a cabo en los últimos años han dado como resultado una experiencia que todos pueden disfrutar y, personalmente, se han convertido en mis juegos favoritos en la franquicia.
La forma en la que la típica historia de un juego se ha dividido en tres partes, cada una con una serie de ideas interesantes y personajes con los que por fin es posible crear un vínculo, hacen que recorrer esta región sea sumamente divertida. Si bien concluir cada aventura por separado no llega a ofrecer una gran satisfacción, una vez que llegas a los créditos, estoy seguro de que podrás apreciar el viaje que llevaste a cabo.
Desde una perspectiva estética, Scarlet & Violet cuentan con una serie de locaciones interesantes y diseños que no solo reflejan una inspiración en España, sino que también toman en consideración la época en la que nos encontramos. Sin embargo, técnicamente, los juegos dejan mucho que desear, al grado de que la experiencia de recorrer el mundo abierto no será la que muchos esperan. Por su parte, y como era de esperarse, la música es de primer nivel, con composiciones que seguramente se convertirán en las favoritas de muchos fans.
Pese a que el gameplay se mantiene estable, la teracristalización es una mecánica interesante que no puedo esperar para ver en acción en todos los eventos competitivos. Los nuevos pokémon valen mucho la pena, y la mayoría hace que, el ya de por sí extenso número de criaturas disponibles, logre enriquecerse con una serie de combinaciones de tipo, movimientos y habilidades únicas. Por su parte, el mundo abierto logra ofrecer la libertad que muchos deseaban, y aún presenta el sentimiento de asombro que siempre ha existido en la serie al descubrir a una criatura nunca antes vista, pero ahora no necesitas entrar a un combate para experimentar esto, ya que es algo que puedes ver caminar frente a ti.
Pokémon Scarlet & Violet valen mucho la pena. Este es un fantástico cierre para un gran año en el Nintendo Switch, y no puedo esperar para ver cómo es que Game Freak y The Pokémon Company toman todo lo que aquí funcionó, y lo expanden en un futuro.